Los secretos de las semillas de girasol

Dentro de la familia de las semillas probablemente unas de las más conocidas sean las de girasol. Sin embargo, la mayoría de las personas las consume sólo por hábito y desconoce sus increíbles propiedades nutritivas.

En primer lugar, las semillas de girasol son buenas para el corazón. Son muy ricas en ácidos grasos que ayudan a reducir la síntesis del colesterol malo (LDL) y aumentan la del bueno (HDL).

Además, su alto contenido de fibra también permite disminuir la absorción intestinal del colesterol que proviene de los alimentos.

Por otro lado, su gran contenido calórico las convierten en una excelente fuente de energía. No obstante, por esta misma razón no se recomienda comer más que un puñado por día, especialmente para quienes intentan bajar de peso.

También son excelentes para los deportistas o las personas que realizan mucho esfuerzo físico porque contienen mucho potasio y magnesio.

Por último, una característica no menos importante es que son divertidas para los chicos y nos ayudan a incluir alimentos saludables en su dieta. Formar buenos hábitos alimenticios es muy importante para su futuro. Nada mejor que acostumbrarlos a comer semillas desde pequeños.

 

VOLVER